El Barómetro de las Américas-Colombia sostiene que el país posee una tendencia hacia el centro y que en los últimos años se ha movido más hacia la izquierda, también se destaca que los militantes de los partidos políticos tradicionales se diferencian poco en cuanto a sus opiniones sobre temas económicos y sociales, siendo los simpatizantes de los partidos no tradicionales los que tienen más definida una ideología política [1].
En Colombia es usual escuchar o leer a diferentes referentes políticos decir « no somos de izquierda, ni somos de derecha, somos de centro ». Señalando a sus contrincantes políticos de ser polarizadores y extremistas. Pero ¿Qué es el centro y qué representa? ¿Exigir derechos es ser extremista? ¿Es el centro la renovación política?
¿Que es el centro?
Por definición, el centro o centrismo es la opción de la moderación, del consenso y las soluciones pactadas. Su inserción en el respeto a la institucionalidad hace que los centristas asuman una posición reformista, de actualidad y con poco o escaso interés por cambios estructurales o de fondo. »El centrismo es una mezcla ideológica entre la socialdemocracia, la tercera vía y la incorporación de criterios liberales que no rompen con las tradiciones. Los partidos de centro se alimentan de políticas moderadas y dentro de los mecanismos de participación establecidos convocan a las acciones menos riesgosas para sus socios en el poder [2].
Ramos Garbiras, 2018
Es importante tener en cuenta que ubicar al centro dentro del escenario político es difícil, por su posición moderada tiende a confundirse con otras visiones políticas y porque muchas veces asumen una posición camaleónica por cálculos electorales y marketing político.
El centro y su discurso sobre la polarización
¿Acabar con la polarización?
La polarización es un término que viene usándose cada vez más en el escenario político colombiano desde la campaña presidencial del 2016.
La polarización suele reducirse al movimiento hacia los extremos políticos, por un lado la extrema derecha representada en Uribe y el Centro Democrático y por el otro, por una mal denominada extrema izquierda representada en Gustavo Petro y la naciente Colombia Humana, este discurso se está usando para anular una proclama real de oposición de resistencia [3].
S. Tufano, 2018
Sin bien Sara Tufano menciona que lo que está pasando en el país es una radicalización de la derecha, no se puede olvidar que el denominado centro en Colombia, liderado por el Partido Verde, sigue atacando con argumentos de una falsa polarización. Falsa porque lo que pide la ciudadanía y los otros representantes políticos (a los que llaman extremistas), no es más que los reclamos a los derechos, las demandas sociales insatisfechas frente a una política tradicional que no negocia y se niega a reconocerlas.
¿El centro renovador?
El denominado centro en Colombia se origina de la fuerza política creada por la coalición entre el Partido verde y el Polo Democrático, toma fuerza en cabeza de Sergio Fajardo, quien dice ser la “decencia” en la política [4].
De los Rios, 2020
Para el Centro no existe un partido o fuerza política diferente a ellos que sea conveniente, se denominan como los únicos que pueden construir sobre lo construido, los únicos que podrán crear consensos y diálogos con otros políticos.
Sin embargo, el centro no tiene un discurso renovador y no se diferencia en el fondo de la derecha tradicional colombiana. Primero, porque no pretende hacer cambios estructurales, por el contrario, es cercano a los poderes económicos y políticos. Segundo, porque procura colocar agenda a los que señala como extremos. Es decir, sin hacer consenso con la que denomina extrema izquierda. Y por último, es más cercano a la forma y fondo del gobierno de la derecha tradicional. Ejemplos no faltan.
Como vemos en este ejemplo, el centro defiende los intereses de las políticas económicas neoliberales. Entonces, ¿qué tipo de renovación propone el centro?
« El centrista no defiende un ideal, sino que se somete a las decisiones tomadas por otros oportunistas. El centro no es una doctrina o ideología política, es el aprovechamiento « oportunista » de una coyuntura derivada de otras posiciones políticas » [5]
El centro, una tendencia mundial
Las tendencias de centro no solo se presentan en Colombia. Ellas han tomado gran fuerza en todo el mundo y por lo general están acompañadas de oportunismo y conveniencia. Por lo anterior, es difícil que puedan reducirse fácilmente dentro de los escenarios políticos.
“El centro político no es débil, sino que está superpoblado en el sentido de una representación pluralista más equilibrada. La tendencia que, en mi opinión, resulta imparable, es el declive de los partidos populares. Esta tendencia es secular y se da en toda Europa” [6].
W.Merkel, 2019
El centrismo viene siendo una técnica de gobierno que no propone cambios sustanciales en el modelo económico, ni en la forma como se relacionan los políticos y los poderes económicos. Utiliza un marketing político que se basa en un discurso no generador de odios, en un lenguaje conciliador y ajeno a la confrontación política. Se presentan como, p. ej. en Colombia, de antiuribista y antipetrista, colocando a los dos “extremos” como polos dañinos para la democracia y también los iguala y clasifica en discursos generadores de odio, estrategia que logra seducir a una buena parte de los electores desinformados.
El centro no existe
Teniendo en cuenta lo anterior podemos concluir que el centro es una falacia política, puesto que sus formas de gobierno son de derecha liberal. Su estrategia para seducir votantes es el discurso semántico de « somos los del consenso », olvidando que es con el disenso que se construye la democracia. También se presentan como los anti, antiviolencia, anti-uribistas, anti-pretistas, colocan a los dos “extremos” como nocivos para la democracia y equiparan a la extrema derecha -la que ha dejado a su paso miles de muertos- con aquellos que reclaman justos derechos, a los que ellos denominan, extrema izquierda.
El centro representa un peligro para la sociedad colombiana, ya que, históricamente, una vez son gobierno, se alían con las fuerzas más anacrónicas del país. El falso centro es una corriente que desde cualquier campo de las ciencias políticas no tiene arribo; es demagogia pura para las sociedades y es más peligroso para la democracia un político que no se sabe cuál es su posición y cómo actuará en momentos de tensión, a uno cuyas posiciones ha defendido siempre con argumentos… la mayoría de las personas que se hacen llamar políticamente como de centro, son demagogos porque la política es un debate constante de ideas; en el centro están los políticos que pertenecieron a cuantos partidos políticos se encargaron de desangrar el erario público y, ahora ante el despertar de la sociedad Colombiana, ven una oportunidad de perpetuarse en el poder presentándose como “alternativa” a los problemas que aquejan a Colombia [7].
De los Rios, 2020
Bibliografía
Citas
[1]Observatorio de la Democracia, 2019 (ref.lectura Observatorio)
[2]Ramos Garbiras, 2018 (ref. lectura Ramos)
[3] S. Tufano, 2018 (ref. lectura Trufano)
[4] De los Rios, 2020 (ref. lectura de los Rios)
[5] F. Mora, 1971 (ref. lectura, Rodriguez Kauth)
[6] W. Merkel, 2019 (ref. lecture Merkel)
[7] De los Rios 2020 (ref. lectura de los Rios)
Referencias
Referencias que se encuentra fácilmente en internet o en las bibliotecas virtuales como la Luis Ángel Arango. Click aqui y los llevará a la biblioteca.
Vous devez vous connecter pour laisser un commentaire.